07 junio 2010

I Triatlón Sierra del Segura Ciudad de Hellín


Poco más puedo pedir a lo acontecido ayer. Si hubiesen estado Bea y Pablo habría rozado la perfección.

En cuanto a lo deportivo, un pasito más hacia adelante, mejorando y sintiéndome cada vez más fuerte y más resistente. Un puesto 19 en la clasificación general individual y el 14 en el parcial de ciclismo, junto al 3er puesto conseguido por equipos (trofeo y cheque de 100€ incluido) me han dejado un muy buen sabor de boca que seguro durará mucho tiempo. Si hace unos 4 ó 5 años me hubieran dicho que hoy estaría aquí haciendo lo que hago, por supuesto que no lo hubiese creído.

En el plano personal más de lo mismo. Este tipo de batallas, libradas entre uno y uno mismo, te hacen crecer a todos los niveles. Cuando uno derrota a sus miedos, cruza barreras a priori indestructibles, y desplaza sus límites cada vez más allá de lo imaginable, se siente pleno, autorrealizado. Maslow, decía que el nivel más alto de su famosa pirámide son las necesidades más elevadas, las que se hallan en la cima de la jerarquía, y a través de su satisfacción, se encuentra un sentido a la vida mediante el desarrollo potencial de una actividad, logrando así la autorrealización de la persona. Yo me siento así, encuentro sentido a lo que hago y lo que hago da sentido a mi vida, y compartirlo con la gente que más quiero hace que no quiera abandonarlo nunca.

El día de cualquier carrera, cuando me levanto a las 4 de la mañana para desayunar, siempre me hago la misma pregunta "¿qué coño hago yo aquí y qué necesidad tengo yo de esto?". Cuando comienzo a nadar ya estoy deseando salir del agua para montar en bici. Al poco de comenzar a pedalear ya estoy loco por dejar la bici de los huevos y ponerme a correr. Después de unas cuantas zancadas ya deseo que acabe tanta tortura. ¿Y cómo es posible que después de tantas horas deseando acabar e incluso deseando no haber empezado nunca, SÓLO por el hecho de cruzar la meta encuentre sentido a tanto despropósito? Yo no lo sé, y tampoco me importa hallar la explicación. Solo sé que quiero seguir sintiendo lo mismo durante mucho más tiempo.

Lo de correr era un trámite para llegar a ésto. ¡Gazpacho manchego auténtico!

Recarga de hidratos la noche antes (croissant con chocolate). Solo me faltó la horchata fresquita.

Cena de la pasta. Perfecta.

Unos boxes minimalistas muy bien organizados.

A falta de Manu y Apache, el equipo del bronce.

Nadal lo mordió a las 18h, yo a las 16, por lo que él me imitó mí.

2 comentarios:

Juan Pi dijo...

Pero a ti te hace falta esto???????????

Juan Pi dijo...

Me referia a la droga esa del Red Bull.